JUAN JACOBO ROUSSEAU: APRECIACIÓN CRÍTICA

1. Rousseau planteó una concepción filosófica de la educación que constituyó la amenaza más importante a la educación predominante hasta esa época.
2. El Para qué y el Qué de la educación presentan en su propuesta un cambio radical en el fenómeno educativo. La intencionalidad de la educación es otra, responde a los intereses y necesidades del educando; se propone el cambio de la direccionalidad existente hasta ese entonces de una educación prevista para ser impuesta al educando por una educación que se va realizando en la medida que el educando, en respuesta a sus intereses y necesidades, va aprendiendo por su propia experiencia. Los contenidos educativos hasta los 15 años son por lo tanto totalmente distintos a los predominantes en esa época.

3. La concepción Rousseauniana al cambiar al maestro por el alumno en el protagonismo del proceso educativo, violentó una relación enseñante - aprendiz que predominó durante siglos y con ello contribuyó al surgimiento de métodos en los que el niño sería el actor principal de su educación.
4. Sus aportes constituyen la fuente a la que acudieron los filósofos, pedagogos y teóricos de la llamada “Escuela Nueva”. Con él se inicia el llamado “Modo Progresista” de la educación.

5. Rousseau es, sin embargo, objeto de críticas que, no obstante, no disminuyen la balanza a su favor. Se le critica el hecho de haber planteado una educación de élite, la económica, ya que él consideraba que sólo los niños ricos debían ser educados. Se le critica también el proponer un tipo de educación que desconoce que el fenómeno educativo es un fenómeno social y que de ninguna manera puede ni debe darse al margen del contexto social en el que se realiza. Su propuesta educativa de una educación desligada de la sociedad es por lo tanto utópica e ideal. El considerar que la acción del docente, que aisla a su alumno de su sociedad para evitar que ésta la contamine, pueda ser totalmente neutra, es también irreal e imaginario porque todo docente es un ser social y por lo tanto su acción refleja, consciente o inconscientemente los valores, comportamientos, intereses y necesidades sociales.

6. Por último, muchos sostienen que generalizar el tipo de educación propuesto por Rousseau, en sociedades preocupadas por extender la educación a la mayor parte de la población, es prácticamente imposible.